miércoles, 11 de febrero de 2015

Reseña: "El pozo y el péndulo. Cuentos colombianos"


el pozo y el pendulo


El pozo y el péndulo


 (Ed.) Elkín Restrepo, Claudia Ivonne Giraldo, Lucía Donadío, José Zuleta


Sílaba Editores


193 páginas


Medellín


2014


ISBN: 978-958-8794-45-7


Tapa rústica



*****


Por David Pérez Marulanda


Odradek, la prestigiosa revista literaria que inició en 2003 con una frecuencia semestral, cambió a formato libro, en el cual El pozo y el péndulo el segundo volumen. Se trata de una antología de 21 cuentos de igual cantidad de los mejores cuentistas colombianos, vigentes y fallecidos. La antología da una muy buena primera impresión: la edición está finamente lograda, una hermosa portada de tapa rústica con solapa y una diagramación muy amable a la vista.


Los cuentos se encuentran en diversos estilos y temáticas. Algunos de los incluidos fueron:


El fierro de Miguelito”, de Rocío Vélez de Piedrahíta. La historia de un delegado del gobierno en el proceso de paz con la guerrilla colombiana durante la presidencia de Belisario Betancur. El delegado se encuentra con un niño guerrillero quien es el encargado de guiarlo hasta su campamento base. Un cuento impactante, realista, frío, que nos recuerda la historia cíclica de nuestro país, de las repeticiones históricas que nunca recordamos y cómo los inocentes terminan siendo el juguete de los grupos armados.


A este relato podemos conectar “El planeta cojo”, de Juan Diego Mejía. La narración en primera persona de un soldado sobre su amor imposible por una hermosa negra atleta, a quien conoce en un pueblo del Urabá y que, por coincidencia, vuelve a encontrar después de muchos años. Ambos fueron víctimas de la misma guerra, cada uno de la forma en que era más vulnerable. Encantan las descripciones físicas que hace el autor e impacta la crudeza de la guerra contada desde adentro, de cómo quienes la viven deben apartar con fuerza las consecuencias y marcas que les quedan en el cuerpo y en la mente para seguir adelante.


Otros cuentos se desarrollan en la cotidianidad urbana, y logran el efecto de hacerla extraña. Es el caso de “Hay una señora en la cama de mamá”, de Gabriel Uribe Carreño, la historia de un cómo un pequeño percibe el universo de su casa al tener a su madre enferma de gravedad. El autor representa con gran acierto la perspectiva del niño sobre el juego, la enfermedad, las hileras de hormigas en el patio, los adultos, para zambullir al lector en sentimientos y descripciones de su propia infancia.


También hay cuentos muy divertidos. Uno de ellos es “Las formas de la espera”, de José Andrés Ardila. Una relato sobre cómo un hombre debe lidiar con la impuntualidad excesiva de si novia, un desarrollo en la que se mezclan de forma muy agradable y creativa la narración con el diálogo, un lenguaje oral que resalta su realismo y comicidad. Otra pieza es “La sirena viene hacia mí”, de Luis Miguel Rivas: una mañana de domingo inverosímil, la canción La sirena viene hacia mí sale del radio de un carro viejo que pasa frente a la casa del personaje, y mientras éste observa y describe todas las particularidades del carro y de su música, reflexiona sobre sí mismo, sus decisiones y la relación con su pareja. Las situaciones descritas, si bien nadan en lo absurdo, son amenas y posibles.


La literatura fantástica se presenta en esta antología con sólo un cuento, Gólgota, de Campo Ricardo Burgos. La curiosa historia de un hombre que busca viajar en una máquina del tiempo a la época de Jesucristo y, una vez lo logra, toma una decisión imprevista y de consecuencias monumentales.


Entre los cuentos restantes, se denota gran calidad y nivel de escritura. Como toda las antología, tiene sus altibajos y algunos textos van a caer al cliché narrativo o se quedan cortos para el nivel de la selección. En cuanto a los autores, si bien la antología se subtitula Cuentos colombianos, el lector encontrará que la gran proporción de los escritores son antioqueños, pero se comprende en la medida en que el libro corresponde a una publicación originada en esa región.


La segunda entrega de los libros de Odradek es un pieza que vale la pena tener tanto como material de lectura como de colección, porque publicaciones literarias como ésta, que poseen un recorrido histórico y aún se mantienen, son escasísimas en Colombia. Es de las pocas ventanas que tenemos para poder ver la producción de los cuentistas nacionales más importantes de la actualidad.



Reseña: "El pozo y el péndulo. Cuentos colombianos"

No hay comentarios:

Publicar un comentario